En un principio aparecen pocos síntomas, pero luego se van agregando otros, que llevan a una movilización cada día mas difícil. Inicialmente pueden presentarse signos de fatiga, debilidad general, perdida de peso, acompañados de dolor en las articulaciones pequeñas (manos y pies) y luego en articulaciones mayores (codos, hombros y rodillas). En otros casos puede afectar a otras parte del organismo.
El dolor articular, hinchazón y rigidez que dificulta el movimiento, característico luego del descanso nocturno (rigidez matutina), es producido por la inflamación de las articulaciones.
Las articulaciones se van deformando, haciéndose grandes y toscas, con desviación de los dedos, que incluso se sobreponen unos sobre otros de manera involuntaria, siendo difícil modificar esta posición, ya que al hacerlo se causa dolor intenso. Si la enfermedad avanza , las lesiones pueden llegar a destruir las articulaciones, ocasionando dolor intenso, incapacidad para caminar y problemas para realizar actividades que antes se llevaban acabo sin problema, afectando el trabajo diario.
En algunos casos la enfermedad afecta a una sola articulación, sin lesiones aparentes en las demás, limitando el dolor en dicha articulación (rodilla. codo, etc.) pero existen otros casos donde las lesiones se dan en diferentes articulaciones e incluso en órganos con una rápida progresión.
Fuente: Libro "Preguntas frecuentes en Artritis Reumatoide".
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